Cuando un artista presenta miedo escénico ya no tiene porque sentirse indefenso e incomprendido ante esa emoción, existe la falsa idea de que las emociones no se pueden controlar, que no se puede hacer nada cuando la ansiedad lo aborda, afortunadamente existen técnicas efectivas para el control de las emociones.
A continuación se presentan una serie de estrategias para controlar un nivel bajo de miedo escénico:
Respiración abdominal, respirar con el abdomen profundamente por lo menos durante 5 minutos antes de salir al escenario puede ayudar.
Beber un poco de agua para aliviar la sequedad de la boca.
Pensar en el presente, centrarse en la actuación dejando de lado el resultado final.
Visualizar la actuación como se ha practicado de una manera ideal sin errores.
Centrarse en disfrutar la actuación.
En el caso de un nivel alto de miedo escénico, este se caracteriza por las ganas vomitar, salir huyendo de la situación, o quedar paralizado ante el escenario, en este caso se requiere de un programa completo de entrenamiento en habilidades psicológicas personalizadas para el artista.
Hay que considerar que el miedo escénico o ansiedad de evaluación, es una emoción que no es fácil de controlar sin la formación adecuada, se requiere de una serie de técnicas como por ejemplo de relajación para controlar las sensaciones corporales, técnicas cognitivas para el cambio de pensamientos negativos o irracionales a positivos y técnicas comportamentales para modificar la conducta antes de salir al escenario y crear adaptaciones a las situaciones de estrés.
Además del conocimiento de las técnicas se deben de diseñar etapas de acercamiento a la situación real de actuación en un escenario adaptadas a las necesidades del artista y a las características de la actuación para que se pueda aplicar con seguridad lo aprendido.